Joan María Canals, esta mañana has continuado tu Liturgia de la tierra en el cielo, en la Nueva Jerusalén. Esta mañana, día del apóstol san Bartolomé, has concluido tu última peregrinación a Tierra Santa y desde ella a Zaragoza -meta también de peregrinación mariana y jacobea.
Dejaste para siempre -sin preverlo del todo- la comunidad en la que -en cuerpo y alma- te habías entregado a la renovación de la vida religiosa y a la renovación litúrgica de la iglesia española y a la cual quisiste dirigir en tus últimos años. Fuiste en peregrinación a tierra Santa y allí te sorprendió el otro y definitivo Via-crucis. Hoy, esta mañana, lo has concluido y te has identificado con Aquel que tantas veces dijo en ti: “esto es mi cuerpo entregado”. Han concluido, Joan, los sufrimientos espirituales y corporales que, sobre todo, te han acosado en este último tiempo… ¡Descansa ya en la paz de tu Señor!
Aquí nos dejas múltiples recuerdos: tu Biblioteca Litúrgica -auténtico hontanar- siempre tan bien cuidada y actualizada. Tus estudios tan pacientes sobre la Liturgia de la Iglesia, a la que serviste con pasión tanto en la Congregación para el Culto y los Sacramentos, como en la Conferencia Episcopal Española. Tantas huellas tuyas quedan en el anonimato de la Gran Reforma litúrgica.
Fuiste una extensión existencial de la Sacramentalidad de la Iglesia. No soportabas vivir los sacramentos de forma rutinaria. La Liturgia no era para ti una norma que había que observar, sino una gestualidad generadora de una comunidad trans-generacional. Si te excedías no era por favorecer la exterioridad o el tradicionalismo, sino para extender tu mundo interirior y dignificar la celebración de los Misterios.
Tu sensibilidad te hizo extraordinaria y extremadamente fiel a la amistad, cuidadoso, elegante en tus detalles de cercanía y vulnerable -hasta quizá la susceptibilidad- ante el desprecio y desplazamiento.
Esta mañana se ha concluido tu Calvario, tu soledad y ya estás gozando de la Liturgia que tanto cultivaste aquí en la tierra. Como a Bartolomé también el Señor Jesús te habrá dicho: “Has ver cosas mayores…Te aseguro que verás el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre”.
Adiós, Joan… te echaremos muy de menos pero ahí quedará tu complicidad con el Espíritu de la Santa Liturgia (24 de Agosto 2022).
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Siento con vosotros la pérdida para este mundo de Canals. Le conocía de haber hecho cursos de liturgia con él en Madrid. La Iglesia, vuestra Congregación, su familia y tantas/os otros lo han ganado para el cielo. Allí, aún sin saber cómo, será algo así como celebración litúrgica sin fin. Le agradecemos su vida y sus aportes.