Presento un video que preparé hace un tiempo y que me parece importante también hoy. En él abordo el tema de la inter-generacionalidad. Se trata de un tema especialmete urgente en la vida consagrada actual europea y americana. Y lo mismo cabría decir de las comunidades cristianas en Europa y América.
He dividido este video en tres partes: I. Las actuales generaciones en la vida consagrada. II. ¿Qué hacer con la propia vida cuando se dispone de más tiempo. III. Crear comunidades de encuentro y convivencia intergeneracional.
Analizo en el video lo que podríamos denominar las cuatro generaciones y sus características: la generación joven, la generación intermedia, la tercera generación y la cuarta generación. También menciono el desarrollo de la longevidad en la sociedad y la necesidad de nuevos diseños sociales y nuevos cuidados.
Este análisis pretende involucrar a todas las generaciones en nuevas formas de encuentro, de comunión y de exploración. Lo que es válido para las familias, la sociedad, es también válido para la vida consagrada y para la vida eclesial en parroquias y diócesis.
Por otra parte, apunto a la necesidad de instituir y crear lo que podemos denominar “ministerio inter-generacional” para las Iglesias, para las comunidades.
Planteo ocasionalmente algunas preguntas retóricas que pueden servirnos de acicate: ¿por qué no pedir a los jóvenes en formación el mismo nivel de compromiso, ascesis y esfuerzo que hoy se exige a los jóvenes deportistas o artistas, o científicos…? ¿Porqué ser tan condescendientes a veces? Sin exigencia no tendremos genios, sin ascesis no se conseguirán nuevos records.
También me pregunto si la crisis de fe no estará relacionada con la desaparición del deseo y, por lo tanto, la necesidad de entrar en la dinámica y formación estimulante del deseo. Y me atrevo a mencionar la necesidad de una “cumbre” para abordar el “cambio climático” en la vida consagrada, comparando la fragmentación generacional con un país de viejos separado de una menguante edad media y una escasa juventud .
Es obvio que esta propuesta puedo hacerla porque está avalada por referencias y citas de filósofos, sociólogos y pensadores religiosos. Todo ello despersonaliza mi interpretación y la enriquece.
Propongo finalmente un decálogo -que fue firmado por jóvenes y mayores- que resume los puntos fundamentales de esta propuesta y nos convoca a actuar. Te invito a reflexionar conmigo en esta temática tan apasionante y creo que necesaria.
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